El presidente de la institución provincial es recibido en Vila-real por el alcalde de la localidad, José Benlloch, quien se compromete a aportar su “potencial” al proyecto solidario común con la provincia
Solidaridad con los proyectos que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos de la provincia y un claro compromiso por trabajar de la mano son dos de las ideas que han compartido hoy en Vila-real el presidente de la Diputación de Castelló, José Martí, y el alcalde de la localidad, José Benlloch, en una jornada en la que Martí ha visitado al primer edil vila-realense en el consistorio municipal y ha podido participar en las fiestas que se desarrollan esta semana en honor a la Mare de Déu de Gràcia.
El presidente de la Diputación, que no ha ocultado las discrepancias que hubo con el alcalde de Vila-real en la composición final del grupo de diputados de la corporación provincial, ha insistido esta mañana en dejar claro que “José Benlloch y yo siempre hemos tenido muy buena relación”, subrayando que “siempre he tenido muy en cuenta las opiniones de una persona que tiene esa vis política en los genes”.
Para José Martí, “es todo un honor, y una oportunidad que no podíamos perder, venir hoy a la primera ciudad tras la capital en número de habitantes”. Según Martí, “en política es normal la discrepancia, pero lo fundamental ahora es nuestra inequívoca disposición por trabajar juntos”. En este sentido, recalca que “todos saben que nuestro nuevo modelo piensa mucho en el reto de hacer frente a la despoblación, pero eso no quita que tengamos muy presente que la Diputación es de todos, y ciudades importantes como Vila-real forman por supuesto parte del proyecto provincial”.
En esta línea, recuerda por ejemplo el acuerdo con la Generalitat para impulsar el Fondo de Cooperación Municipal, “que dará a los municipios la posibilidad de mejorar la vida de sus ciudadanos”. José Martí insiste en que “hay que creer por completo en la autonomía municipal y en la mayoría de edad de los ayuntamientos, pues ellos son los que saben sus prioridades, sus necesidades y, por consiguiente, dónde quieren gastarse el dinero”. Martí, para acabar, ha agradecido el recibimiento “del alcalde y de los con concejales, porque para el presidente de la Diputación estar en Vila-real es estar en su casa”.
Por su parte, José Benlloch ha destacado que “a veces nuestras opiniones las hacemos públicas y no escondemos nuestros sentimientos, pero las discrepancias que hubo, que a nadie se le oculta que en Vila-real no nos sentimos cómodos, son cuestiones del partido”. Con ello, ha remarcado que la Diputación y el Ayuntamiento somos dos instituciones importantísimas para la vida de la gente, y hoy es un día claro para dar el mensaje claro de que la Diputación ha de formar parte de la vida de los vila-realenses”, sobre todo teniendo en cuenta que “hablamos de un nuevo modelo de Diputación tras 24 años del PP y del ‘fabrismo’, y desde nuestro potencial, pero también desde la humildad, aportaremos todo lo necesario para el proyecto solidario de la provincia”.