El presidente de Partenalia expone ante la Asociación Nacional de Departamentos Franceses los desafíos de la Unión Europea
11 de abril. Javier Moliner, desde la presidencia de Partenalia, el principal lobby de gobiernos locales intermedios en las instituciones europeas, se ha trasladado hoy hasta Paris para incorporar a las provincias francesas en su lucha contra la despoblación rural.
Para ello, el presidente de la red europea de provincias más importante ha participado en la Asociación de Departamentos Franceses, el equivalente a la FEMP en el país galo, para “sumar nuevas administraciones a Partenalia y con ellas, más argumentos para afrontar con éxito uno de los mayores desafíos que Europa tiene por delante como es el problema sociodemográfico”.
Unos nuevos argumentos materializados en el compromiso claro mostrado por los departamentos franceses y que fortalecerá la lucha contra los fenómenos de éxodo rural emprendida por Moliner desde la presidencia del mayor lobby europeo de provincia. “Compartimos preocupación y desde esa coincidencia vamos a sumar su contribución para hacer más grande el proyecto de Partenalia y para ser cada día una voz más fuerte que sea interlocutora ante las instituciones de la Unión Europea”, ha celebrado Moliner.
No en vano, el presidente de Partenalia ha incidido en la necesidad de que “las administraciones más cercanas a los vecinos, las provincias en España y los departamentos en Francia, cuenten con un importante altavoz en Europa. De este modo, conseguiremos estar integradas dentro de la evaluación e implementación de los fondos europeos para el nuevo periodo más allá de 2020 en los que se deberán materializar el compromiso de Europa con una verdadera cohesión territorial que discrimine positivamente a aquellos que más lo necesitan”.
De hecho, durante su intervención en la Asamblea de la federación que aglutina unas de las principales entidades territoriales francesas, el presidente de Partenalia ha reivindicado que “las administraciones locales somos las más próximas al territorio, quienes mejor conocemos los problemas de nuestros pueblos y, además, tenemos la capacidad de gestión y la voluntad de igualar oportunidades para que ningún ciudadano se quede atrás”.
Es por ello que, tal y como ha hecho hincapié Moliner, “tenemos que ir todos de la mano para que Bruselas sitúe en su agenda el problema de la despoblación y entienda que frenar la despoblación, al igual que sucede en la Diputación de Castellón, es la mayor obsesión para muchísimas administraciones”.
